sábado, 19 de enero de 2013

Junta para la ampliación de estatutos



Entre los frutos que nos ha legado de la Institución libre de enseñanza el que más repercusión tuvo en la formación de la intelectualidad española del primer tercio del siglo XX, fue la creación de La Junta para Ampliación de Estudios, inspirada por Giner de los Ríos. Se trata de un organismo oficial de carácter nacional que fue creado mediante el decreto del 11 de enero de 1907. Su presidente fue Ramón y Cajal (1907-1934) y como Secretario General ejerció José Castillejo.

 Carmen de Zulueta explica del siguiente modo los orígenes y objetivos de la Institución Libre de Enseñanza inspirado en el pensamiento de Francisco Giner de los Ríos:

“En 1906 se estudiaron programas extranjeros y se buscó la manera de que este nuevo centro que se planeaba no produjera reacciones políticas. Luis de Zulueta, uno de estos discípulos, escribe a Unamuno en septiembre de ese mismo año, pidiéndole información sobre la Fundación Calatrava, obra del P. Cámara en Salamanca. Tal fundación mandaba clérigos al extranjero para ponerlos a un nivel europeo contra el movimiento modernista.


El 11 de enero de 1907, aparece el Real Decreto, firmado por el ministro de Instrucción Pública, Amalio Jimeno, que crea la Junta para Ampliación de Estudios e Investigación Científicas. El objetivo básico era poner a España al nivel europeo y para ello se propuso  dos cosas: la primera era provocar una corriente de comunicación científica y pedagógica en el extranjero y la segunda era agrupar en núcleos de trabajo intenso y desinteresado los elementos disponibles del país.

El primer presidente fue Santiago Ramón y Cajal y los vicepresidentes Azcárate y Torres Quevedo. La labor de la Junta era poner a España en un nivel cultural comparable al de otros países europeos, es decir, transformar la educación española en todos sus aspectos. La reforma de la educación requiere empezar por lo más alto, ya que no se puede mejorar la educación primaria sin mejorar la de los maestros. Así la primera función de la Junta fue crear el Patronato de Pensiones para preparar a esos futuros profesores. De esta manera la preparación del pequeño grupo de pensionados se iría filtrando hasta llegar al nivel de la escuela primaria o de la de párvulos.

A pesar de la extraordinaria habilidad con que la junta se había formado también tuvo sus dificultades con los cambios de gobierno” 

Los vocales de la Junta estaban formados por lo más selecto de la inteligencia española de su época, a la vez eran un grupo pluralista: Marcelino Menéndez Pelayo, , Ramón Menéndez Pidal,  Joaquín Costa, Joaquín Sorolla, entre otros.

La Junta buscaba una reforma del sistema educacional español ya que estaba constituido  por formas viejas y dominadas por la iglesia católica y, a la vez, europeizar a España en el sentido de abrir España a las nuevas corrientes de pensamiento y ciencia. De ahí el programa de enviar pensionados a estudiar en los centros más prestigiosos europeos Así, en 1910, se crean: el Centro de Estudios Históricos, dirigido por Ramón Menéndez; el Instituto Nacional de Ciencias Físico-Naturales, dirigido por Ramón y también se crea La Residencia de Estudiantes, cuyo director fue Alberto Jiménez Fraud. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario